La salida de Samuel Umtiti del Barcelona se antoja como misión imposible, al menos si se quiere recuperar algo de lo invertido en su fichaje.
El central galo es uno de los descartes prioritarios, pero resulta que no hay ningún club ahora mismo interesado en el futbolista. En el mundo del fútbo corre como la pólvora la noticia que hace poco le dieron los médicos del club catalán al defensa, y es que su cartílago ya no regenera, por lo que su drama con las lesiones podría continuar.
Ante esta situación, el Barcelona deberá o bien asumir la ficha del jugador para los próximos tres años, o bien “regalarlo”, es decir, darle salida como cedido o liberarle para que busque nuevo destino.
Gran problema para el conjunto azulgrana, que no atraviesa por una buena situación, ni en lo deportivo ni tampoco económicamente hablando.