Samuel Umtiti tiene los días contados en el FC Barcelona y es que la directiva le ha puesto fecha de caducidad. El central tiene hasta el mercado de invierno para encontrar un nuevo destino y es que no se valora su estancia en el club más allá del próximo enero de 2022.
La idea de Laporta y su junta directiva con el zaguero galo es proceder a su salida de inmediato, y es que cobrando una de las fichas más elevadas del plantel y siendo un descarte de Koeman, no es viable que pueda continuar un día más como jugador azulgrana.
Tal es la sensación de cansancio y malestar con el futbolista, que vuelve a sonar con fuerza la rescisión de contrato del futbolista por bajo rendimiento. Los servicios jurídicos del club han estado analizando esta posibilidad y si el jugador no colabora, se verán obligados a despedirlo, aunque ello conlleve que el futbolista los demande.
El agente del futbolista intenta calmar los ánimos y entiende que debe encontrar un equipo para su representando, el problema es que o bien aceptan rebajar sus pretensiones en más del 50%, como mínimo, o ningún club podrá pagarle al central lo que percibe en el Barcelona.