El destacado partido de la jornada en los Países Bajos se vio obligado a detenerse debido a la inaceptable conducta de los seguidores del Ajax. El Clásico de los Países Bajos se suspendió a los 55 minutos debido a la aparición masiva de bengalas tanto en las gradas, como en el terreno de juego por parte de los fanáticos locales.
Durante el enfrentamiento contra el Feyenoord, los seguidores locales detuvieron el partido en dos ocasiones arrojando bengalas al campo, manifestando su frustración por el bajo rendimiento de sus jugadores, quienes se encontraron en desventaja con un marcador de 0-3 ante su principal rival nacional. Ni siquiera el medio tiempo logró calmar los ánimos, que ya estaban exaltados antes del partido debido a la difícil situación deportiva que atraviesa actualmente el Ajax, destacando el reciente despido de su director deportivo, Sven Mislintat.
En el tiempo en que el partido se jugó con normalidad, el Feyenoord demostró un dominio evidente y logró establecer una ventaja de 0-3 en el marcador en tan solo media hora de juego. El delantero mexicano Santiago Giménez se destacó como el protagonista al anotar dos goles y brindar una asistencia.
Ante la abrumadora superioridad de su equipo rival, los seguidores radicales del Ajax comenzaron a protestar y culminaron sus acciones arrojando bengalas, lo que llevó al árbitro a suspender el partido. Aunque aún quedaba más de media hora para disputarse, es incierto cuándo se reanudará el partido y si se permitirá la presencia del público, aunque parece poco probable que esto último ocurra.