Tras el no de Paul Pogba, que renovará con el Manchester United, la Juventus de Turín ha puesto los ojos en un nuevo efectivo para mejorar la medular, Aurélien Tchouaméni.
El futbolista internacional francés es la opción elegida por Fede Cherubini para el pivote y es que el jugador del AS Mónaco lleva tiempo siendo rastreado por los ojeadores de la entidad bianconera.
Su contrato expira en 2024, pero está dispuesto a salir de Francia para liderar el nuevo proyecto de la Vecchia Signora. Los primeros contactos se han producido y desde el entorno del jugador son receptivos a la propuesta bianconera.
Con un valor de mercado de 30M€, y un salario dentro de lo “normal”, mucho menos que Pogba, es la opción preferente para el próximo mercado estival, aunque no se descartaría intentar su fichaje en enero. El Mónaco exige al menos 40 “kilos” para empezar a negociar. El problema del club turinés es que el Chelsea también lo desea.