Roque Mesa es uno de los objetivos que tiene Las Palmas encima de la mesa para cimentar su regreso a la Primera División. De todos es sabido el gusto del presidente canario, Miguel Ángel Ramírez, por repatriar a jugadores de la isla y sin duda el teldense sería un gran atractivo tanto para cuerpo técnico como para afición.
Ahora mismo el mediocentro se encuentra sumido en la lucha por evitar el descenso del Valladolid en una última jornada que se antoja apasionante.
Con contrato en vigor hasta junio de 2023 ya habría dado su OK los amarillos y si nada se tuerce llegaría con la carta de libertad a la isla 6 años después de su salida rumbo al Swansea City.
Con esto el equipo canario pondría la piedra al nuevo proyecto en el que se espera mantenga el bloque actual incorporando 4 o 5 jugadores diferenciales.