Aunque el PSG está a disgusto con los problemas físicos de Sergio Ramos, es total y absolutamente imposible que se pueda proceder a la rescisión del contrato del jugador de Camas.
El sevillano aún no ha debutado y las últimas noticias hablan ya de que aunque vuelva a entrenarse, podría no debutar hasta enero, lo que supondría pasar sus primeros seis meses en el conjunto galo en el dique seco. Todo un contratiempo para el futbolista y un problema importante para la entidad de la Ligue 1, que se siente sumamente molesta con el jugador y su entorno.
Al parecer, Ramos habría forzado en exceso durante su última etapa, llegando muy tocado cuando firmó por el PSG. El problema es que superó las pruebas físicas previas al contrato, y desde la directiva gala están con la mosca detrás de la oreja, pensando en que les han colado un gol por la escuadra. Tras 5 horas de reconocimiento, hubo muchas dudas, pero todo cumplía según los procedimientos, aunque surgen dudas de si el jugador se infiltró para obtener mejores resultados en dichas pruebas médicas.
Sea como sea, ya está todo por escrito y en el caso de que el PSG quiera rescindir a Ramos deberá pagarle en función a los 10M€ netos que percibe por esta temporada y por otra que tiene firmada.
La situación más factible sería llegar a una solución intermedia en la que el club galo facilitaría su salida y así Ramos podría probar suerte en otro destino, aunque con las dudas levantadas sobre su estado físico esto se empieza a complicar, al menos para el fútbol europeo. Como comentamos en Todofichajes.com, el Inter de Miami estaría dispuesto a ofrecerle acomodo al central y es que al no ser una competición tan exigente seguro que podrían contar con el ex del Real Madrid mucho antes que los galos.