El Atlético de Madrid y Jorge «Koke» Resurrección caminan en la misma dirección pensando en una renovación del futbolista, eso sí las posturas son muy distintas entre lo que piensa el jugador y lo que quiere la directiva.
Según fuentes cercanas a la operación, el Atlético quiere que el capitán extienda su vínculo más allá del próximo 30 de junio de 2025, pero no quiere un contrato de larga duración, es de la idea de ir renovando anualmente y así poder valorar el rendimiento y el estado físico del jugador de 32 años. Además se le ofrece un salario a la baja acorde a la situación real de la plantilla y al rol del centrocampista actualmente.
KOKE QUIERE SEGUIR PERO NO A CUALQUIER PRECIO
Koke ha dicho por activa y por pasiva que desea seguir en el Atlético hasta que le aguantes las piernas, aunque ha reconocido que ya le cuesta cada vez más. Pese a todo se considera un futbolista con largo recorrido todavía, de ahí que quiera renovar mínimo por dos años más otro opcional. Uno de los temas calientes sería el salario y es que el futbolista no quiere perder en esta operación casi la mitad de su salario, aceptaría una rebaja pero consecuente.
Aún queda mucho por aclarar entre las dos partes lo que complica la continuidad de Koke, y es que de conseguirse la renovación veremos en qué condiciones.