José Mourinho está tratando de convencer a Christian Eriksen para que acepte la renovación y sea una pieza clave de su nuevo proyecto deportivo en el Tottenham.
El técnico portugués sabe que se acerca la posible salida del danés y es algo con lo que no quiere tener que lidiar, de ahí que esté en continuo contacto con el centrocampista para hacerle cambiar de opinión.
Eriksen acaba contrato el próximo 30 de junio de 2020 y tiene sobre la mesa dos ofertas, de Real Madrid y PSG, además de la propuesta de mejora de contrato de los Spurs, por lo que deberá tomar una decisión de manera inminente.
Aunque el futbolista tenía clara su salida del equipo cuando estaba Pochettino, el aire nuevo traído por Mourinho está haciendo dudar acerca de su futuro.