Leo Messi hablará en las próximas horas pero todo apunta a que seguirá finalmente en el Barcelona. El argentino es consciente que tendrá que cumplir contrato, por lo que deberá retrasar un año su salida.
Entre una de las peticiones del futbolista estaría asegurar la continuidad de su amigo y compañero Luis Suárez, que actualmente tiene casi cerrado su pase a la Juventus, tras haberle comunicado Koeman que no cuenta con él.
Puesto que asegurar la continuidad de Messi es la prioridad para el Barcelona, parece que la directiva y el míster tendrían que aceptar la petición del astro para calmar las aguas.
En cualquier caso, esto complicaría las cuentas ya que no habría ahorro en las fichas más elevadas y habría que renunciar a firmar un jugador de ataque este verano.
Todo deberá resolverse en las próximas horas y es que en el caso del charrúa, su llegada a Turín estaba prácticamente acordada. Ahora todo cambia y es que retener al delantero uruguayo seria clave para llevar las aguas a su cauce.