Luis Enrique podrá seguir o no en la Selección Española, todo apunta a que será lo segundo después del Mundial, pero lo que tiene bastante claro es que no volverá a coger las riendas del FC Barcelona.
El técnico asume que su ciclo en el club catalán ya finalizó en su día, con un gran éxito por cierto, por lo que tiene ninguna intención de exponerse a un posible fracaso del proyecto de Laporta. Según informa su círculo más cercano, una vez salga de La Roja valoraría volver a los banquillos con un nuevo club, pero nada que ver con los azulgranas.
Es más, ahora mismo estaría en la pole para suceder en el cargo a Diego Pablo Simeone si el argentino finalmente decide salir a final de curso. También cuenta con ofertas desde Inglaterra, por lo que se tomará unos meses para decidir cuál es el mejor proyecto para regresar al mundo clubes. El Barcelona tendrá que pensar en un plan B para Xavi, pero desde ya queda descartada la opción Lucho.