El futbolista del Atlético de Madrid, Rodrigo de Paul, fue uno de los protagonistas del partido en el que Argentina venció a Países Bajos en el Mundial de Qatar para estar en las semifinales del torneo. Para el jugador supuso un auténtico esfuerzo poder echar una mano a sus compañeros en la cita porque varios días antes había tenido una lesión que hizo que fuese seria duda.
El centrocampista colchonero, acabado el choque, tuvo un par de mensajes entre el orgullo, la reivindicación y la revancha, por todo lo que había pasado, especialmente en su país, en los días previos al duelo ante Países Bajos.
“Trabajo mucho para que me pasen estas cosas. Pocas saben el esfuerzo que yo hice estos tres días. Me dio bronca que se filtre. Pero el técnico me dejó elegir y me siento orgulloso de mí y mis compañeros”, señaló al acabar el choque.
El propio jugador añadió un mensaje en sus redes sociales a este respecto: “¿Mi humilde consejo? Es con el ejemplo. Trabajen sin pisar cabezas, sin mirar al del al lado, sin ser envidiosos, cuesta, pero cuando lo logras, el orgullo es imposible de describir”.