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Asegurar la continuidad de Paulo Dybala es un objetivo real para la Juventus de Turín. Aunque hace unas semanas se estancó la negociación, el club turinés entiende que esta no es la mejor fórmula y es que con el jugador finalizando contrato en 2022, lo mejor sería proceder a su renovación y después escuchar ofertas.
Pese a que las exigencias del futbolista no van a ser cumplidas, se confía en poder alcanzar un trato que beneficie a ambas partes. Es decir, la Juventus entiend que Dybala pueda estar decidido a salir en verano y por ello, se le ofrecerá una ampliación con vistas a obtener un mayor rendimiento a su salida.
De no ser así, el argentino llegaría al verano entrando en su último año de contrato y obligaría a la Vecchia Signora a proceder a su venta por un precio inferior a su valor de mercado.
Las dos partes se han citado para retomar las negociaciones, y por parte del club hay confianza en sacar adelante el acuerdo. Eso sí, Dybala no está convencido y de ponerse las cosas tensas, forzará para salir en verano y es que sabe que el tiempo juega a su favor.
