Luis Suárez estuvo a un paso de firmar por la Juventus de Turín, pero un problema con el pasaporte y la nacionalidad del jugador provocaron que dicha operación se fuera al traste por lo que el ariete apostó por el Atlético de Madrid.
Ahora, el delantero charrúa es agente libre tras finalizar su vinculación con los rojiblancos y aunque tiene una oferta importante de la MLS, concretamente del Inter de Miami, no sería hasta 2023 cuando ponga rumbo a Estados Unidos. Esto ha servido de argumento a Allegri para solicitar a la directiva de la Vecchia Signora el fichaje del atacante.
Aunque se trata de un delantero veterano y que ha padecido varios problemas físicos, el preparador italiano considera que es clave sumarlo al proyecto, no solo por su calidad si no por el gen competitivo que puede transmitir a los más jóvenes. Es más, para Allegri sería Disneyland si se pudiera firmar a Suárez, Di María y Pogba, tres opciones que no parecen para nada complicadas para el club turinés y en las que ya se encuentra trabajando.
Suárez querría seguir jugando en LaLiga, pero sabe que esta sería su última oportunidad para probar en Italia, competición que siempre le llamó la atención. Firmaría por una temporada con salario de estrella aunque menor al que percibía en el Atlético.