El internacional español, Adama Traoré, se encuentra actualmente en negociaciones con el Wolverhampton para extender su vinculación. Aunque el contrato del atacante expira en 2023, su gran rendimiento ha despertado el interés de los grandes clubes de la Premier League, que aprovecharían las próximas ventanas de transferencias para tratar de conseguir su fichaje.
Para evitar una salida fácil del jugador, al menos los Wolves quieren asegurar una elevadísima suma con su traspaso, por este motivo confían en sacar adelante la propuesta de renovación presentada. La idea sería ampliar por dos temporadas más el vínculo del extremo, hasta 2025, además de duplicar su ficha.
Esto conllevaría una cláusula de rescisión superior a los 120M€, que harían prácticamente imposible su salida de la plantilla de Nuno a excepción de un pago de al mínimo 80M€.
Tras perder a Diogo Jota por no tenerlo bien atado, ahora brilla con el Liverpool, los Wolves no quieren que se repita la historia con Adama ni Raúl Jiménez.