Como ya ocurriera en años anteriores el Sevilla sigue atento a la situación actual de Lenglet y es que el internacional francés no entra en los planes de futuro del Barcelona.
En principio la idea del club era traspasarlo o cederlo pero en estos momentos ningún club quiere asumir su alto salario.
Es cierto que a principios del verano desde Arabia Saudí presentaron una oferta en donde el Barcelona cobraría un pequeño traspaso, librándose también de la totalidad de la ficha pero a día de hoy el francés no está dispuesto a salir de Europa.
Esto sin duda merma la capacidad de la dirección deportiva de cara a confeccionar la nueva plantilla y desde el club empiezan a valorar otras alternativas.
Sin duda el desenlace que gana más fuerza es la rescisión de contrato pero en estos momentos las posiciones están muy distanciadas. El central no está dispuesto a perdonar el capital que le corresponde algo que deja al Barcelona con las manos atadas.
Otra opción que está encima de la mesa es que salga cedido, pero sólo el Nápoles hasta la fecha ha valorado el préstamo y haciéndose cargo únicamente del 20% de la ficha.
Por lo pronto el Sevilla ya ha mostrado al futbolista sus intenciones y en el caso de que rescinda su contrato parece que el Sánchez Pizjuán es la plaza que ganaría más fuerza.