El PSG está con el agua al cuello con Neymar, y es que siendo el segundo jugador que más cobra de la plantilla, es prácticamente inasumible que continúe en la entidad más allá de este verano.
El problema para Al Khelaïfi y los suyos es que el jugador tiene contrato hasta 2025 y una opción de renovación automática hasta 2027, con lo que de no querer salir metería en serios apuros al equipo galo.
El Chelsea es uno de los clubes interesados en el jugador, pero aquí cada uno juega su baza. La Juventus también entraría a la puja, pero ninguno de los dos estaría dispuesto a pagar la ficha del brasileño, que ha perdido calidad y bajado drásticamente su rendimiento.
Con esto, la única solución posible es firmar una cesión de uno o dos años con cualquier de los interesados, asegurándose una opción de compra atractiva, y mientras tanto asumir la mitad de la ficha o incluso el 60% para poder completar la salida de Neymar este mismo verano.
Recordemos que el salario de Neymar es de 37M€ brutos anuales.