La historia de Ousmane Dembélé en el PSG podría ser más breve de lo que se pensaba en su inicio cuando decidieron llevárselo hace algunas semanas del FC Barcelona. El equipo galo asume que se precipitó, por la necesidad de potenciar su línea de ataque con jugadores determinantes, y es que con el overbooking actual de delanteros, el peor parado en las preferencias de Luis Enrique sería el ex azulgrana.
Una vez se ha confirmado la continuidad de Mbappé y tras cerrar sobre la bocina los fichajes de Gonzalo Ramos, Kolo Muani, Barcola y Ekitiké, sumados a los ya conocidos de Asensio Y Kang In Lee, el internacional francés no tiene ahora mismo todas consigo para ser parte del tridente ofensivo titular que presenta Lucho.
Tanto es así, que Al Khelaïfi no vería del todo mal colocar a Dembélé en el mercado de invierno. De los actuales fichajes es el que menos inversión necesitó pero de los que tiene un valor de mercado más alto. Si el jugador además no se siente cómodo con su nuevo rol, es la mejor solución para todas las partes.
El agente de Dembélé, Moussa Sissoko, ya está en contacto con varios clubes de la Premier League, entre los que se encuentran Newcastle, United y Liverpool, ambos ya les contactaron antes de poner rumbo a París, para valorar un posible cambio de aires en enero. Teniendo en cuenta que hay Eurocopa, si el atacante no tiene los minutos deseados podría verse fuera de la convocatoria de Francia. La fórmula de la cesión no está descartada.