El Inter de Milán sigue sin cerrar la renovación de Milan Skriniar y empieza a desconfiar de las intenciones del eslovaco. El PSG ya estuvo detrás del jugador el pasado verano y prepara una nueva ofensiva para hacerse con sus servicios.
Con contrato en vigor hasta junio de 2023 todo apunta a que abandonará el club para poner rumbo a París este invierno por una cifra reducida o en verano con la carta de libertad debajo de brazo.
Ahora el club lombardo tiene el difícil trabajo de encontrar un nuevo referente para la defensa siendo Nathan Aké uno de los nombres que estarían manejando. El internacional holandés ya estuvo cerca de hacer las maletas el pasado verano pero finalmente la operación se cayó a última hora
En principio el futbolista siempre ha demostrado que está muy contento en Manchester pero la idea de tener mayor protagonismo dentro de un equipo podría desnivelar la balanza hacia los interistas.
En cualquier caso no será una operación sencilla y es que los italianos tendrán que asumir un traspaso que rondará los 30M€.
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