Tanto club como jugador quieren seguir de la mano y tratarán de buscar la mejor solución
El Inter de Milán quiere seguir un plan con Romelu Lukaku, quién está cedido del Chelsea pero su intención es permanecer en el club italiano ya que es ahí donde mejor se encuentra. El delantero tiene contrato con los blues hasta 2026 y su desvinculación no parece tarea sencilla para los italianos ya que les exigirán una cantidad de dinero considerable.
Es por ello que en San Siro están buscando maneras para no realizar un gran desembolso económico y esto pasaría por extender la cesión por una temporada más y rebajar las exigencias económicas en el contrato del ariete belga. Lukaku tiene claro que su sitio está en Milán a pesar de que Graham Potter ha dejado caer que le gustaría hablar con él al finalizar la temporada y explicarle sus intenciones.