El Girona no deja de mirar al mercado en busca de oportunidades para fortalecer su plantel de cara a la próxima temporada, en la que jugará en Europa por méritos propios. Uno de los nombres que figura en la agenda de Quique Cárcel es Renato Tapia.
Y es que el internacional con Perú ya fue tentado el pasado mes de enero durante el mercado de invierno, pero finalmente apostó por seguir en el Celta, equipo con el que termina contrato el próximo 30 de junio y con el que todavía no ha renovado.
Las dudas de la entidad con su continuidad, ya que durante la primera mitad del curso apenas participó, hacen prácticamente inviable que su continuidad se prolongue más allá del final del curso, algo que quiere aprovechar el club catalán para sumar un centrocampista con experiencia en LaLiga y de ciertas garantías, si logra mantener un buen nivel, a coste cero.
Actualmente el futbolista está recuperándose de una lesión muscular, aunque todo apunta que reaparecerá ante el Rayo en la próxima jornada del campeonato doméstico.