El Celta de Vigo no quiere sorpresas en forma de disgusto a final de temporada y es que tras apostar fuerte por el regreso de Borja Iglesias, la idea es que quedárselo en propiedad.
Firmó por una temporada en calidad de cedido pero sin opción a compra, pero con los 4 goles anotados hasta la fecha y creciendo en su rendimiento, el Celta no quiere que el Betis diga no basándose en unos probables buenos números del ariete a final de curso.
Es por este motivo que se pretende iniciar las negociaciones nada más arrancar 2025, incluso aprovechando el mercado de invierno.
SIN OPCIÓN DE COMPRA PERO CON EL BETIS DISPUESTO A VENDER
Pese a que no hubo opción de compra en el contrato de préstamo, por la urgencia de la operación, el Betis está a favor de la venta del futbolista, que con contrato hasta 2026 y una elevada ficha, todavía podría complicar más las cosas si activa su renovación automática por otro año más. Esto facilitaría y mucho las cosas para la escuadra gallega.