Se avecinan grandes cambios en la plantilla del Atlético de Madrid y es que el próximo verano, la línea medular podría sufrir varias bajas. Seguras serían al menos tres, lo que obligará a la entidad a acudir al mercado de fichajes.
El primero y como ya adelantamos aquí hace semanas es Lucas Torreira, que volverá al Arsenal tras su cesión. El club rojiblanco descarta su contratación definitiva por lo que habrá que buscar otro pivote. Pero es que Kondogbia, que llegó para ocupar la vacante dejada por Thomas no termina de convencer a Simeone, lo que sumado a las ofertas con las que cuenta, dejarían de nuevo a los rojiblancos sin un efectivo para la contención.
Fuera del pivote, también está en la bandeja de salida Héctor Herrera, futbolista que acaba contrato en verano de 2022 y que no se piensa en renovar. Esto hace que sea uno de los elegidos para salir al término del presente curso. En este caso, el Oporto podría recuperarlo, y es que su ex equipo ya preguntó por él este pasado enero.
Si todo esto no fuera suficiente, aún quedaría otro jugador con su futuro en el aire y ese es Saúl Ñíguez. El centrocampista ha perdido peso en el once titular y con Bayern y United detrás de él, parece que apostará por un cambio de aires.
De confirmarse estas bajas, el Atlético al menos debería sumar otros cuatro jugadores en la ventana de transferencias de verano, sin duda un esfuerzo extra en el que ya está echando horas el director deportivo, Andrea Berta.
POSIBLES CANDIDATOS
Simeone ha solicitado a su secretaría técnica el fichaje de Giovani Lo Celso, que no tiene sitio en el Tottenham, además de valorar la incorporación de Kanté, que pasa por la misma situación en el Chelsea.