El Betis tiene muy avanzadas las negociaciones con el Real Madrid para sellar el regreso del hijo pródigo el próximo enero.
El utrerano ya estuvo cerca de abandonar el barco el pasado verano pero la lesión que sufrió el jugador en los JJOO truncó la operación llegada a Sevilla.
Ahora la situación del andaluz es bastante delicada y es que no acumula ni un minuto de juego desde que el italiano ocupa el banquillo. El futbolista quiere volver a sentirse futbolista y lleva semanas presionando a su agente para que intente cerrar su retorno al Benito Villamarín.
A pesar de contar con otras ofertas el andaluz no quiere valorarlas y es que tiene claro que necesita al Betis para relanzar su carrera.