José Bordalás insiste con el fichaje de Mauro Arambarri para el Valencia y tanto es así, que ha dado orden de priorizar la llegada del uruguayo del Getafe para las dos próximas ventanas de transferencias.
Tras no haber podido sumar a su ex pupilo en este mercado estival, el técnico se ha sentado con la directiva y la dirección deportiva valencianista para transmitirle su deseo de contar con centrocampista antes o después.
Si es posible, la idea sería sumarlo en enero, pero de no ser así, le esperará hasta el próximo verano. Bordalás no ha cubierto la demarcación de Arambarri, pese a haber tenido alternativas para hacerlo y es que lo ha tenido claro desde el principio, o llegaba el azulón o no quería un remiendo que no fuera de su agrado.
Por el momento, Arambarri tiene claro el plan a seguir y es que con una finalización de contrato en 2023, no aceptará la renovación, lo que obligará al Getafe a venderlo en el peor de los casos el próximo verano. Sabiendo esto, no se descarta un acuerdo mejor económicamente hablando con el Valencia en enero, para que todas las partes queden satisfechas.
Su cláusula es de 20M€ pero el Valencia confía en obtener su fichaje en el siguiente mercado por una cifra inferior a los 10 “kilos”, aunque antes los azulones deberán encontrar un recambio para la medular.