El ariete serbio es un objetivo prioritario para el conjunto blue de cara al próximo mercado.
Al proyecto millonario del Chelsea solo le falta una pieza en ataque, un «9» de área que sea sinónimo de gol y que acompañe en la zona ofensiva a los Kai Havertz, Joao Felix y Mudryk de turno. Ese jugador que falta en el ataque es Benjamin Sesko, o así ha pensado la directiva del club londinense junto a su técnico Graham Potter.
La operación, sin embargo, no será nada sencilla. Sesko se encuentra cedido en el RB Salzburgo tras fichar por el RB Leipzig hace unos meses, por lo que tendrán que negociar con el equipo alemán sin que este haya llegado a debutar en Bundesliga.
El serbio es una apuesta de presente y futuro por la que el Leipzig pediría alrededor de 50 millones de euros, cifra más que asequible para un club con el poder adquisitivo del Chelsea.