David Beckham, gran amigo de Sergio Ramos, está tanteando el terreno para tratar de convencer a su ex compañero para que deje el Real Madrid y viaje con su familia a Florida para unirse al Inter de Miami, del cual es propietario.
La MLS es una competición que se encuentra en plena expansión y que basa su crecimiento en la llegada de jugadores de primer nivel procedentes del fútbol europeo. Precisamente, este verano, la franquicia norteamericana sumó a Higuaín, ex del Real Madrid, y a Blaise Matuidi, ambos de la Juventus.
Estos dos futbolistas han reconocido recientemente el peso que ha tenido Beckham para cerrar sus respectivos fichajes, y es que el famoso ex futbolista inglés confía en sus influencias para crear uno de los equipos llamados a hacer historia en la MLS.
La situación con Ramos es la siguiente. Acaba contrato en 2021, y el Real Madrid le ofrece dos temporadas pero revisando su salario, es decir, no solo no subirlo ni mantenerlo, sino que deberá ajustar sus emolumentos a la actual situación. Es innegociable por parte de Florentino Pérez, que ha dejado la decisión en manos del futbolista y que la respetará sea cual sea.
El Inter de Miami le ofrecería a Ramos el contrato deseado, es decir, tres temporadas y una ficha similar a la que percibe en la capital de España. Saben que es una apuesta arriesgada pero también un negocio lucrativo, ya que solamente en ventas de camisetas y marketing se amortizará la llegada del central español.